PIZARRA
El yacimiento de pizarra propiedad de Villar del Rey Natural Stones S.L. es una de las explotaciones mineras de pizarra más antiguas de Europa y, posiblemente, la de mayor tamaño. Está situada en una formación geológica única en el mundo, en la localidad pacense de Villar del Rey. Esta cantera ya se explotaba por los romanos hace 2.000 años, quienes extraían pizarras en Villar del Rey para ser utilizadas en la construcción de Emérita Augusta (hoy la vecina ciudad de Mérida), tal y como se puede observar en sus históricos monumentos.
También hay evidencias de que estas antiguas canteras se han venido explotando, de forma más o menos organizada, durante los últimos 300 años. Las pizarras de Villar del Rey se han utilizado al menos en los últimos 150 años para cubrir los tejados de muchos edificios históricos de España, algunos de los cuales conservan en la actualidad sus pizarras originales.
El yacimiento se encuentra dentro de la zonación general del Macizo Hespérico, en el límite entre las zonas Centro Ibérica y Ossa Morena; y más concretamente dentro de la macroestructura regional de Sao Mamede – La Codosera, que abarca materiales desde el periodo Ordovícico al Devónico. El yacimiento forma parte del pizarral del Devónico Medio, abarcando una pequeña superficie dentro de los materiales de este periodo.
Forma un sinclinal de pizarras de plano axial vertical limitado por un sill de diabasa (también en explotación). Está atravesado por la falla del Guerrero, que con un salto en dirección de 600 metros, corta transversalmente el sinclinal. La forma del sinclinal es estrecha y alargada con dirección aproximada Este – Oeste (N-110º-E).
El material que lo forma es una potente serie sedimentaria plegada en la que alternan niveles de pizarra productivos y niveles estériles, ambos en posición subvertical. El 55% del total del yacimiento tiene posibilidades de aprovechamiento.
Los niveles productivos tienen un espesor variable entre 0.6 m y 3.5 m y están formados por pizarras negras ampelíticas de gran homogeneidad, compacidad y resistencia, que admiten fácil labrado en láminas finas a través de los planos de esquistosidad. Estos niveles tienen una gran continuidad longitudinal, que se ha demostrado con el tiempo por las investigaciones realizadas, al correlacionar las columnas levantadas en los frentes de explotación con las de los sondeos de investigación. La cantera ha llegado a producir 24.000 T.M. de tejas de pizarra al año.
La estimación de reservas probadas, reconocidas por procesos físicos directamente en las tareas de investigación, ascienden a más de 9 millones de m3. Se incluyen aquí solamente los niveles pizarrosos que se han puesto en explotación y de cuyo rendimiento industrial se tiene constancia.
GRANITO
La existencia de una masa rocosa de diabasas en la proximidades de Villar del Rey con buenas condiciones de afloramiento, situación geográfica y accesibilidad apropiadas, y con muy buenas cualidades geotécnicas para su utilización ornamental y para la fabricación de áridos ha motivado su explotación desde los años 90.
La masa rocosa explotada pertenece a un sill de diabasas encajadas en un macizo rocoso compuesto de pizarras y filitas pertenecientes a la Unidad Sao-Mamede – La Codosera – Puebla de Obando, en la Zona Centro Ibérica (ZCI), todo ello enmarcado dentro del Macizo Hespérico.
Se trata de rocas compactas de color oscuro; hacia el centro del dique son masivas y presentan disyunción en bolos, en los bordes adquieren una fábrica anisótropa. Todo apunta a que la génesis de estas rocas diabásicas sea volcánico.
La edad de estas rocas no está determinada pero se le puede asignar una edad Carbonífero Inferior.
Nuestra explotación tiene una canterabilidad media. El tamaño de bloque estándar tiene unas medidas aproximadas de 2,20 x 1,30 x 1,30 m, obteniéndose bloques de hasta 3,50 x 1,40 x 1,50 m
La estimación de reservas probadas es superior a 104 millones de M3.
Las canteras de pizarra y de granito de Villar del Rey sólo han explotado hasta la actualidad una pequeña parte de este gran yacimiento.
